Smartphones, Sportwatches, Smartwatches, Wristbands, Healthwatches, Phonewatches: ¿qué elijo para seguir mi actividad deportiva?

Resulta que finalmente hemos formado el propósito de hacer un poco más de actividad física. Y una de las razones por las que encaramos esta decisión reside en que actualmente podemos: entrenar, correr, levantar pesas o andar en bici sin aburrirnos como ostras. Recurriendo para ello a todo el poder que la tecnología y sus diversos chiches tienen para brindarnos en materia de motivación y entretenimiento. Hasta aquí: todo muy bien. Ya tenemos el calzado, la ropa y el equipamiento para la actividad; estamos decididos a dejar atrás nuestras vidas de Koalas en retiro. El paso que sigue, pues, es precaverse con toda la parafernalia de instrumentos tecnológicos que prometen ayudarnos a seguir nuestra actividad física, progresar en nuestro desarrollo deportivo o motivarnos y entretenernos durante el ejercicio.

Sucede, sin embargo, que cuando ingresamos a Internet para echar un vistazo a los avances tecnológicos que prometen hacer más fructífera y duradera nuestra carrera deportiva, comienza el problema. Las miles de opciones disponibles en el mercado parecen tener todas la misma finalidad; pero resultan significativamente distintas.

- Oye, pero si yo lo único que quería era seguir mi actividad deportiva, piensas. Pero resulta que puedo hacerlo mediante un teléfono inteligente, un reloj deportivo, una pulsera deportiva, un reloj inteligente... 

- Entonces: ¿Cuál diablos escojo?

Bienvenido, amigo o amiga, al mundo de la maravillosa diversidad. O, según se mire, también al de la habitual parálisis decisoria por multiplicidad de opciones. Acabas de entrar en un laberinto del cuál trataremos de sacarte lo más pronto posible. Antes incluso de que empieces a cejar en tu intento de seguir el progreso de tu actividad física.

Lo principal que debes tener en mente es que en medio de todo este laberinto de opciones, realmente solo hay un par de elecciones valiosas y fiables para tus propósitos particulares; el resto de los dispositivos y programas para seguimiento deportivo, no son más que intentos bastante descarados de sacarte dinero de manera regular o herramientas que no te servirán de mucho. 

En efecto: antes siquiera de echar mano a tu tarjeta de crédito o a tu billetera para comprar un dispositivo o pagar la suscripción a una aplicación de seguimiento deportivo (ASD); debes tener en cuenta varios factores. 

El primer factor es la seriedad con que vas a tomar tu cometido. Es decir: la constancia y el grado de vocación de permanencia con que generalmente encaras los propósitos que persigues. En este sentido, si eres un abandonador serial o un procastinator (suena muy cool esa palabreja); lo más conveniente es que empieces siguiendo tu actividad deportiva con el teléfono inteligente que ya tengas y alguna aplicación móvil para seguimiento deportivo en su modalidad gratuita o de prueba. Pues, para ser honestos, al menos en una primera etapa, no resulta estrictamente necesario estar informados sobre variables que dependen de equipamiento adicional o funciones de software muy avanzada. 

Smartphones

El segundo factor que deberíamos tener en cuenta es el teléfono inteligente con que contamos. Una vez que hemos avanzado en el ejercicio de algún deporte o actividad, podemos considerar ya la adquisición de los diversos sensores autónomos para seguimiento de variables biométricas que existen en el mercado del fitness. En este punto, conviene examinar si el teléfono inteligente que poseemos está a la altura de las exigencias deportivas que nos proponemos encarar. Es decir: si este aparato cuenta con el poder de computo, la memoria, el espacio de almacenamiento suficiente y las tecnologías de transmisión necesarias que demanda el seguimiento en tiempo real de cualquier actividad física mediante computadores.  

Si la respuesta es afirmativa y tienes un teléfono que no escupe sangre ni pide clemencia cuando corres 3 aplicaciones en simultaneo, no te molesta sobrecargar el dispositivo y no te incomoda llevarlo encima mientras entrenas; lo más conveniente, pues, es que lo expandas y lo transformes en un teléfono deportivo mediante la adición aplicaciones deportivas y sensores autónomos (frecuencia cardíaca, cadencia de pedaleo, podómetro)

En cambio, si tu teléfono es más bien limitado, la actividad que practicas impide que lo cargues encima o cuando entrenas sientes que llevas un ladrillo en el bolsillo; lo más apropiado, es pensar en un reloj o pulsera. Aparatos a propósito diseñados para no incomodar y que resultan en algunos casos compatibles con actividades tales como: la equitación, la natación o deportes donde llevar un teléfono encima es un expediente poco práctico o imposible. 

Para hacerte una idea de cuán bueno es tu smartphone, puedes revisar la siguiente entrada.

Sportwatches

En general, los relojes deportivos suelen ser más completos y fiables que las pulseras deportivas y relojes inteligentes. En la propia unidad suelen incorporar un sistema de navegación satelital, sensores biométricos, barométricos y medioambientales o compatibilidad para emparejarlos con la unidad mediante dispositivos autónomos y distintas tecnologías de transmisión inalámbrica. Asimismo, con excepción de los teléfonos inteligentes, la complejidad del software y capacidad de personalización de los relojes deportivos suele ser mucho mayor que la del resto de los competidores. Se pueden configurar los campos a mostrar, obtener información relevante para la práctica deportiva e incorporan funcionalidades como las del compañero virtual.

Antiguo modelo reloj deportivo
Forerruner 305. Algo aparatoso
pero muy funcional y fiable

Dentro de este segmento nos encontramos con relojes multi-deporte y relojes específicamente diseñados para: golf, ciclismo, natación, excursionismo y otras disciplinas. Relojes que con el tiempo, observamos, han dejado de ser tan aparatosos como los primeros modelos y cada vez se asemejan más a un reloj tradicional o banda de actividad. Junto con los computadores para ciclismo, estos relojes están pensados para deportistas serios o que están en la meta de serlo. No se trata de dispositivos para comprar, probar y dejar tirados en un cajón. Antes de comprar un reloj deportivo, se debe evaluar, pues, cada una de sus características y llevar adelante una comparación entre las diversas marcas y entre los varios modelos de una misma marca. Ya que sus precios distan de ser económicos y un error en la elección puede ser problemático.

Wristbands (pulseras de actividad)

Las pulseras, en cambio, suelen ser más limitadas tecnológicamente y orientadas al seguimiento de la actividad cotidiana; pues surgieron en el mercado por necesidades presupuestarias (suelen ser más baratas), necesidades estéticas (suelen ser menos aparatosas) y necesidades de mercadotecnia (suelen ser fabricadas por marcas de ropa deportiva). Sin embargo, con el paso del tiempo estos aparatos han ido añadiendo de manera escalonada muchas funciones y características propias de un reloj deportivo. Lo ideal es que si escoges una pulsera busques alguna de las más completas que puedas hallar en el mercado. Una pulsera capaz de emparejarse con sensores de frecuencia cardíaca autónomos del tipo banda de tórax o que incorpore un sensor de FC en muñeca pero el mismo realice lectura de manera continua. 

Smartwatches

A medio camino entre teléfono inteligente y reloj o pulsera deportiva se encuentran los relojes inteligentes; los cuales, al menos por ahora y en su mayoría: no cuentan con la autonomía necesaria, la fiabilidad, ni la robustez para fungir como verdaderos relojes deportivos; ni con la comodidad necesaria para ser considerados verdaderas pulseras de actividad. Gran parte de estos relojes, en efecto, solo se limitan a ser dispositivos de notificación del teléfono inteligente y los sensores que incorporan distan de ser muy fiables. Asimismo, los materiales con que son construidos, no son en su mayoría aptos para la actividad deportiva intensa o inmunes a la inmersión. Tal como las pulseras, estos aparatos están pensados realmente para la actividad cotidiana y no tanto para la actividad deportiva. 

Para citar un ejemplo, podemos hablar del Motorola 360 o el Samsung gear S2; dos dispositivos muy interesantes en lo que toca a productividad, comodidad y elegancia; pero que incorporan un medidor de frecuencia cardíaca que no funciona de manera continua; sino a requisición del usuario. Lo cual, desde luego, los vuelve poco a propósito para seguir actividades deportivas, aunque así lo dejen entrever o lo insinúen sus fabricantes. Por el momento, pues, conviene dejarlos en casa o utilizarlos para observar rápidamente las variables de una aplicación sin necesidad de extraer el teléfono del bolsillo. Pero el teléfono lo deberás seguir cargando necesariamente.

Phonewatches

No obstante lo anterior, los relojes inteligentes -sabemos-comienzan a volverse hoy cada más autónomos y con ello más aptos para el seguimiento de actividades deportivas. No se trata ya de teléfonos que corren una versión de sistema operativo más pequeña o dependiente de un teléfono inteligente. En efecto: desde hace algún tiempo han comenzado a surgir en el mercado relojes-teléfono o phonewatches. Dispositivos que son capaces de correr un sistema operativo completo, que cuentan con su propio sistema de navegación satelital y sensores biométricos nativos. Trascendiendo ya su mera utilidad como dispositivos de notificación o visualización y pasando a transformarse en verdaderos computadores de muñeca.

Conclusiones

Si bien el seguimiento de la actividad deportiva puede llevarse adelante por medio de dispositivos distintos; la selección de uno o más dispositivos, se encuentra estrechamente vinculada con la actividad que pretendes monitorear. La mayoría de los relojes deportivos se encuentran orientados al ciclismo y la carrera a pie. Actividades particulares; requerirán, desde luego, relojes deportivos particulares. A su turno, tanto los relojes inteligentes como las pulseras de actividad se encuentran orientadas más bien a las actividades cotidianas y resultan ser un complemento del teléfono inteligente carente de autonomía. Por lo que si buscar entrenar liviano de peso y sin tantos artefactos, deberás pensar en un reloj deportivo. Pero no debes perder de vista esta nueva raza de relojes teléfonos o independientes, ya que algunos prometen bastante en lo que toca a seguir actividades deportivas.